Nuestro Proceso
de
Elaboración
El mezcal es el resultado de tiempo, paciencia y precisión. Cada agave es cosechado en su punto óptimo de maduración y transformado mediante un proceso que equilibra fuego, tierra y aire.
Doble destilado
CÓMO LO HACEMOS

Se eligen los mejores magueyes en su punto óptimo de madurez, asegurando la concentración de azúcares necesaria para un mezcal de alta calidad. El maguey se deshoja y se extrae la piña, retirando cuidadosamente las hojas para maximizar el uso del corazón.

Las piñas se cuecen lentamente en un horno de tierra, lo que aporta al mezcal su característico sabor ahumado.

El maguey cocido se machaca a mano con mazo de madera sobre tronco de canoa, para liberar sus jugos fermentables.

El mosto se coloca en tinas de fermentación de madera, donde se convierte en alcohol gracias a las levaduras naturales.

El líquido fermentado se destila en alambiques de cobre o barro, concentrando sus sabores y graduación alcohólica.

Se realizan ajustes finales en la graduación alcohólica, equilibrando el sabor y la suavidad del mezcal.